Nutella casera

Este día ha estado más que bonito, salió el sol después de tantos días nublados, me pude levantar tarde porque es domingo y no tenía (tantos) pendientes, limpiamos toda la casa y se ve bonita y aprovechando que se fue la humedad también lavé mis flats (ya era necesario), y bueno con el sol por la ventana, el clima rico, el olor a incienso y los gatos durmiendo lo único que podía hacer este día más perfecto era ponerle Nutella... y lo hice :)

Tengo que decir que en mi infancia nunca probé la nutella, en mi pueblo no era famosa, fue hasta que me mudé a la ciudad, ya en época universitaria que alguien que ni recuerdo quién fue me dio a probar y mi primer reacción fue ¡sabe a duvalín!, y no me hice fan de inmediato, me la topaba de vez en cuando en casa de amigos y así fue como le tome amor poco a poco, y terminé enamorada de ella. Pero como siempre el amor tiene dos caras jajajaja y basta voltear el botesito y leerle los ingredientes para saber que no es tan buena como sabe, su porcentaje de avellanas no es tanto como creeríamos, tiene aceite vegetal agregado, azúcares, saborizantes y conservadores, se los cuento sin afán de asustar porque aún así (sabiendo esto) yo la comía de vez en cuando, y siempre me gusta citar a Suzanne Powell con su frase de "A veces es peor la mala leche que la leche" y como saben no promuevo comer cosas procesadas pero tampoco volverse un amargad@, si puedes dejarlas por completo ¡excelente!, pero si por el momento solo puedes disminuirlas esta bien, cada quien va a su paso, solo quiero que sepas que hay una opción más saludable para casi cada cosa que se te antoja. Y bueno, si eres un aventurer@ de la cocina y prefieres hacer tus propias cosas entonces ¡a comer nutella! pero casera, así saben las avellanas y el cacao realmente, que lo disfrutes.

2 tazas de avellanas
4 cdas. de cacao en polvo
4-5 cdas. de aceite de aguacate (o coco si te gusta su sabor y consistencia)
1/2 taza de jarabe de maple natural

 

Calienta el horno a 150º C.
En una charola con papel encerado pon tus avellanas y hornéalas de 15 a 20 minutos, moviéndolas de vez en cuando (cada 5 min. más o menos), ten cuidado que no se quemen, son delicadas. Cuando estén listas ponlas en un trapito seco, dóblalo para taparlas y frota para que las cáscaritas se desprendan.

Vierte las avellanas peladas en tu procesador de alimentos y deja procesando hasta que se trituren por completo y comiencen a soltar su aceite natural, tal vez debas pararlo de vez en cuando para bajar lo que se sube a las paredes con una palita. Una vez triturado y que ya se vea aceitoso es hora de agregar los demás ingredientes y volver a procesar solo para que se integren, un minuto aproximadamente. 
Puedes guardarla en frasco de vidrio y refrigerar. Deliciosa para comer solita, con plátano, con manzana, con hot cakes, con pan, etc.

NOTA: me han preguntado porque a veces no remojo las nueces y/o semillas si esto potencializa su nutrición, la respuesta es que depende de la receta, por sabor y porque al activar las nueces su vida útil es corta a menos que se deshidraten (o congelen, pero me refiero a su vida dentro de la receta) es por eso que para granolas o en este caso de la nutella prefiero no remojar. Pero si tienes deshidratador puedes hacerlo. Por otro lado recomiendo el remojo en general y sobre todo para recetas crudas/raw, lechadas, etc.